El fiscal general de la República, Tarek William Saab, anunció este miércoles 26 de enero nuevas detenciones e investigaciones contra mafias de combustible en Venezuela.
Luego de que se informara la cooperación entre varios organismos con el Ministerio Público (MP) y de colocar a disposición una vía telefónica para realizar denuncias sobre este delito, 32 personas fueron detenidas en diferentes delitos que implican el combustible.
El fiscal comenzó exponiendo el caso de María Cipriani, quien exigía pagos en dólares para dejar surtir gasolina en la estación de servicio El Deleite, ubicada en Cúa.
Otro caso es el funcionario Jhonatan Castejón, supervisor jefe de la policía del estado Bolívar asignado a la estación de servicio Maipure para su resguardo, “se dedicaba a comerciar el combustible ilegalmente y exigir pagos en divisas a quienes intentaban surtir gasolina”.
También se han presentado otras formas de robo de gasolina donde extraen el combustible de tuberías de las refinerías estatales, en Barquisimeto fueron detenidas ocho personas que realizaban este acto.
“Al momento de su captura les fueron decomisados dos automóviles, dos motocicletas y 1.500 litros de gasolina que habían sido robados para destinarlos a la venta ilegal“, continuó.
Asimismo, el fiscal expuso casos de detención por negocios ilegales de “material estratégico”, como es el caso de Barinas donde tres sujetos fueron detenidas por negociar 40 mil kilogramos de cobre.
“Funcionarios de la GNB les solicitaron la documentación que amparaba la legalidad del material, y estos alegaron que no poseían ningún documento”, señaló.
Y por último, destacó “la detención de cuatro personas en Guárico por la incautación de 9.100 kilogramos de cobre que trasladaban en una pickup y otro vehículo”.
La gestión de Saab se ha destacado por la detención de fiscales que incurren a delitos aprovechando sus cargos: 287 fiscales ya han sido investigados, 249 han sido judicializados, 158 han sido imputados, 27 han sido condenados, 14 se encuentran hoy privados de libertad y 18 tienen orden de aprehensión.
Entre los delitos más comunes está el de corrupción, omisión dolosa, abuso de funciones, alteración de documentos, certificación falsa, explicó el fiscal al tiempo que asegura que la mayoría de los fiscales detenidos son de la “gestión anterior”.
EL UNIVERSAL