No fue la premiere de una película; tampoco la alfombra roja de una premiación. Fue, según describió la prensa estadounidense, “una fiesta para la vieja guardia de Hollywood”. La encargada de reunir a tantas celebrities del mundo del espectáculo fue Jennifer Aniston, que el pasado fin de semana organizó un evento para celebrar la llegada de la Navidad y cerrar el año con amigos.
La fiesta anual de la decoración del árbol de Navidad es la favorita de Aniston como anfitriona. Ella ama la Navidad y por eso, todos los años organiza un encuentro con amigos para celebrarlo. Esta vez, la cita fue el sábado por la noche en la inmensa y lujosa mansión que la actriz tiene en Bel-Air y la consigna fue clara: sin teléfonos celulares, algo evidentemente que los invitados respetaron a rajatabla y, por eso, no se filtraron ni fotos ni videos de la gran velada.
“La fiesta se nos describió como una fiesta divertida de la vieja escuela llena de celebridades”, dijo Page Six en referencia a los famosos que recibieron la exclusiva invitación. Ahora bien, ¿quiénes fueron las grandes estrellas que fueron parte de este festejo navideño? Sandra Bullock, Gwyneth Paltrow, Bradley Cooper, Tobey Maguire y Jason Bateman fueron algunos de los colegas de Aniston que dijeron presente. Por supuesto que también estuvieron las actrices de Friends, Courteney Cox y Lisa Kudrow, con quienes la rubia forjó una gran amistad .
Tampoco faltaron los protagonistas de su último gran éxito televisivo, The Morning Show, Reese Witherspoon y Mark Duplass, ni Jon Hamm, que aparecerá en la tercera temporada de la serie de Apple TV+ y fue al convite con su novia, Anna Osceola, después de que se lo vinculara sentimentalmente con la anfitriona. Entre las caras menos conocidas pero no así menos importantes estuvieron el CEO de Netflix, Ted Sarandos, y el presidente de IAC, Barry Diller, con quienes la anfitriona ha tenido una relación laboral a lo largo de los años.
El gran ausente de la noche fue Brad Pitt, quien desde hace un tiempo ha demostrado tener una muy buena relación con la anfitriona. De hecho, en 2019 participó de esta celebración y, según testigos, no sólo fue uno de los primeros en llegar sino también uno de los últimos en irse. También acudió al cumpleaños número 50 de su ex celebrado en el Sunset Tower Hotel en Los Ángeles. “Las personas importantes en su vida se reunieron para celebrar con ella. Brad encaja en ese grupo y era natural que quisiera venir“, dijo en su momento una fuente cercana a la revista People.
Aunque la actriz tampoco publicó nada sobre esta reunión en sus redes sociales, días antes sí dejó registro de los preparativos cuando compartió una imagen comprando su árbol de navidad. “Buena suerte a todos los Rudolphs de madera ahí afuera”, escribió junto a varias imágenes donde se la ve abrazando a un árbol gigante, en referencia al famoso reno que, según la tradición, tira del trineo con el que Papá Noel recorre el mundo.
La actriz también eligió un reno de madera al que sus perros Lord Chesterfield, un labrador blanco, y Clyde, un Schnauzer, confundieron con un juguete. “Esta fue una idea terrible”, compartió mientras sus mascotas estaban listas para jugar con el nuevo integrante del hogar. “Chicos, sean amables. Él solo está aquí para las vacaciones, solo está de visita”, les rogó sin mucho éxito
LA NACION