La policía encontró un cuadro dantesco en una casa de Beverly Hills, una localidad ubicada a media hora al sur de Ocala.
Los agentes acudieron a la vivienda tras recibir una queja de crueldad animal, de acuerdo con una publicación en Facebook de la policía del Condado Citrus (CCSO).
Inmediatamente después de haber entrado por la puerta, a los efectivos de la policía “los impactó el penetrante olor a amoníaco” que había, según un comunicado.
La casa estaba llena de jaulas y peceras con serpientes y roedores. Los agentes también encontraron ratas y gatos “moviéndose por la vivienda con entera libertad”. Un menor de edad vivía en la casa.
A medida que los agentes caminaban por la vivienda, “se quedaban atónitos por otras condiciones deplorables”.
En un video que se colgó para acompañar la publicación, puede verse el estado de descomposición en que estaba la casa, con peceras unas encimas de otras, junto con basura, paredes sucias, platos y cubiertos sin fregar, mugre y comida podrida.
“Era algo obviamente asqueroso. Estos animales carecían de sus necesidades más básicas”, dijo la publicación en Facebook. “La acumulación de heces fecales y de orina en la casa y en las jaulas provocó una infección de moscas, cucarachas y otros insectos”.
En uno de los dormitorios, los agentes hallaron otras dos jaulas, una con un hurón y la otra, “sumamente pequeña”, con un perro dentro
En otro dormitorio, había más basura, “lo que creó una situación favorable para la proliferación de insectos, donde hasta los colchones estaba repletos de cucarachas”, dijo la publicación, agregando luego que se observó sangre en el piso, “debido a que varios gatos estaban devorando una rata”.
En otro dormitorio más, la policía encontró al menor de edad, rodeado de “unos 50 roedores en jaulas”.
En total, agentes de control animal de la CCSO contaron en la casa más de 300 roedores, siete gatos, un perro y un hurón. La vivienda se aseguró para ser investigada más a fondo, y para sacar los animales restantes.
La dueña de la casa, Shannon Marie Morgan, de 38 años, terminó arrestada con 12 cargos de crueldad animal, y un cargo de negligencia infantil. La relación con el menor de edad, cuya edad no se dio a conocer, no se estableció por el momento. A la mujer se le fijó una fianza de $26,000.
“No vamos a tolerar abusos de ningún tipo”, dijo el jefe de la policía de Citrus, Mike Prendergast, quien le pidió al público que reportara cualquier indicio de negligencia y abuso llamando al Centro de Comunicaciones de la policía del Condado Citrus al teléfono 352-249-2790 o al número de emergencia 911.