Alrededor de 3.500.000 ciudadanos costarricenses están convocados para acudir a las urnas este domingo 6 de febrero, a fin de elegir a su nuevo presidente que dirigirá los destinos de la nación centroamericana durante el cuatrienio 2022-2026.
En estas elecciones, en las cuales también se renovarán los 57 escaños que integran la Asamblea Legislativa (Congreso unicameral), un total de 25 candidatos se disputarán la primera magistratura del país. Este número es un récord de candidaturas en Costa Rica al superar de manera amplia la marca anterior establecida en 2006, cuando se inscribieron 14 personas para competir por la jefatura de Estado.
Las elecciones Costa Rica 2022 comenzarán este domingo en Canberra, Australia, con la apertura de la primera Junta Receptora de Votos para recibir el sufragio de los ticos residentes en ese país.
Quienes votan en el exterior solo lo pueden hacer para escoger al presidente y los dos vicepresidentes del país, pero no a los 57 diputados a la Asamblea Legislativa, quienes también serán electos en los comicios generales de mañana.
Por la diferencia horaria, la primera Junta Receptora de Votos que abrirá sus puertas será la de Canberra, a las 16:00 hora de Costa Rica, pero los resultados de cada uno de los sitios en el exterior no podrán transmitirse hasta las 18:00 hora local de mañana domingo, tal y como lo establece el Código Electoral.
La cancillería de Costa Rica y el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) revelaron este miércoles que están listas las 80 Juntas Receptoras de Votos en 42 países para recibir el sufragio de los ciudadanos residentes en el exterior.
El canciller Rodolfo Solano, la presidenta del TSE, Eugenia María Zamora, sostuvieron una reunión virtual con varios cónsules generales, en representación de los 52 consulados, en 42 países, que apoyarán en la organización de las 80 Juntas Receptoras de Votos que recibirán a los 50 mil 833 costarricenses inscritos para sufragar en el extranjero.
Solano resaltó que «el voto en el exterior, además de revitalizar la democracia costarricense, también contribuye a reforzar la identidad nacional».
El TSE ha indicado que todo está listo para que a las 06.00 hora local del domingo (12.00 GMT) abran los colegios electorales para una jornada que se extenderá por 12 horas y cuyos primeros resultados se publicarán a las 20.45 hora local (02.45 GMT del lunes).
Las elecciones se llevarán a cabo bajo medidas sanitarias de seguridad en el marco de la pandemia de la covid-19
Tres candidatos a la cabeza
Las encuestas señalan que hay tres aspirantes presidenciales que encabezan la contienda por el máximo cargo del país.
1.- José María Figueres, postulado por el Partido Liberación Nacional (PLN):
Tras 24 años de haber terminado su gobierno, el ex presidente de Costa Rica (1994-1998), José María Figueres, intenta regresar a la Casa Presidencial como candidato del partido más antiguo del país: Liberación Nacional (PLN).
El actual candidato es hijo del político más influyente de la Costa Rica de la segunda mitad del siglo XX, José Figueres Ferrer, de quién ha aprovechado su enorme parecido físico para rememorar los grandes cambios que impulsó su familia en la estructura política y económica del país.
El político regresa a unas elecciones nacionales luego de haber perdido hace cinco años la convención interna del PLN ante Antonio Álvarez Desanti, mientras que ahora ganó el derecho de representar al partido que su padre fundó tras obtener 37 por ciento de los votos frente a otros cuatro candidatos.
Para este 6 de febrero, la candidatura del ex presidente apela a la fidelidad de los seguidores históricos del PLN, de quienes creen que Costa Rica necesita ser dirigida por un político con experiencia, pero se enfrenta a quienes mantienen vivos los cuestionamientos en su contra.
Entre sus principales propuestas, Figueres ha anunciado que de regresar al gobierno decretaría «emergencia nacional» en el sector educación, convertir el inglés en el segundo idioma de Costa Rica para hacer obligatoria su enseñanza, un programa para mejorar la situación de empleo y emprendimiento para los jóvenes, entre otras.
También ha ofrecido trabajar por la reducción del déficit fiscal de Costa Rica a un 3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y reducir el nivel de deuda por debajo del 50 por ciento del PIB.
2.- Lineth Saborío, candidata por el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC)
Apelando a su experiencia como directora de la Policía Judicial y ex vicepresidenta de Costa Rica, Lineth Saborío Chaverri es la mujer fuerte del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), por el que contenderá en las elecciones presidenciales del 6 de febrero. Saborío alcanzó la candidatura de uno de los partidos más tradicionales de Costa Rica tras vencer en la convención interna a los actuales diputados Pedro Muñoz y Erwen Masís con un contundente 56 por ciento.
La política es abogada de profesión, con una maestría en Sociología Jurídica Penal y otra en Criminología con Énfasis en Seguridad Humana, lo que la llevó a desarrollar su carrera en el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), del que fue su directora entre 1997 y 2001.
En 2002 fue electa vicepresidenta de la República junto al presidente Abel Pacheco para el período presidencial que se extendió hasta 2006, gobierno durante el cual tuvo como recargo las funciones de ministra de la Presidencia, Planificación Nacional y Justicia.
Como experta en el tema, Saborío ha hecho de la seguridad ciudadana uno de sus ejes de campaña y también ha hecho énfasis sobre el hecho de que su candidatura no cuenta con cuestionamientos por corrupción y asegura que formularía una Estrategia Nacional de Integridad y Prevención de la Corrupción.
Saborío aspira a que el PUSC regrese al poder luego de 16 años de ausencia, para revitalizar a un partido que ha gobernado al país en tres ocasiones desde 1990.
3.- Fabricio Alvarado, un pastor evangélico perteneciente al Partido Nueva República (PNR)
Tras perder en el balotaje con el actual presidente Carlos Alvarado, este periodista y cantante de música cristiana rompió rápidamente con la cúpula de Restauración Nacional y fundó Nueva República con algunos de los diputados que logró en la elección anterior.
Ahora con 47 años de edad y con la experiencia de la campaña anterior, Alvarado ha tratado de sacudirse de las etiquetas que lo califican como «ultraconservador» y de quienes lo critican por mezclar la política con la religión.
En esta campaña electoral, el candidato ha procurado alejarse de las discusiones religiosas y ha centrado su discurso en criticar al gobierno del Partido Acción Ciudadana (PAC) por su desempeño en los últimos cuatro años.
Uno de los puntos en los que el candidato basa su propuesta tiene que ver con la reducción de impuestos, entre los cuales ha anunciado una baja del Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 13 al 9 por ciento.
Otras de sus propuestas tienen que ver con lograr el 100 por ciento de conectividad para los estudiantes del país, la ampliación del Aeropuerto Internacional de Liberia y la reactivación del turismo, que fue duramente afectado por la pandemia del nuevo coronavirus (covid-19).
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