Gustavo Petro y Rodolfo Hernández disputarán la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Colombia el 19 de junio, según el preconteo informativo de la Registraduría.
Con el 98,5% de mesas informadas, Petro sumó 40% de apoyos, Hernández 28% y Federico «Fico» Gutiérrez casi 24%.
Más de 39 millones de colombianos estaban habilitados para acudir este domingo a las urnas en un país en donde el voto no es obligatorio.
La elección se dio en medio de una profunda polarización por el descontento social derivado de la inequidad y la pobreza, además de demandas para reducir la inseguridad en las ciudades y la violencia en las zonas rurales donde operan grupos armados ilegales dedicados al narcotráfico.
Más del 85% de los colombianos piensa, según la encuesta Invamer, que el país va por mal camino. Desde los años 90, el momento más agudo del conflicto armado, no se reportaban números de pesimismo tan altos.
Por ello todos los candidatos ofrecen un cambio aunque no todos de la misma dimensión.
Ya antes de las elecciones, el candidato del izquierdista Pacto Histórico, Gustavo Petro, un economista de 62 años que fue alcalde de Bogotá y perteneció a la guerrilla del M-19, lideraba las encuestas, era el favorito, pero quedó lejos del 50% de apoyos necesarios para evitar la segunda vuelta.
Si ganara en segunda vuelta, Petro sería el primer presidente de izquierda del país en la historia reciente.
En segundo lugar, según el preconteo, se ubicó el empresario de la construcción y exalcalde de Bucaramanga RodolfoHernández, de 77 años, que se presenta como candidato independiente y ganó reconocimiento por sus excéntricos videos en las redes sociales, en los que aparece cantando y montando en patineta eléctrica, así como por su discurso contra la corrupción.
Hernández, que se presenta como un candidato antisistema, un «outsider», supera por el momento al candidato de centroderecha y exalcalde de Medellín, FedericoGutiérrez.
«Fico», como lo conocen, tiene 47 años y propone mantener un crecimiento de la economía al 5% anual para conseguir los recursos que permitan financiar los programas destinados a reducir la pobreza, mejorando la educación, la salud y la vivienda a los más pobres, además de generar empleo.
Si finalmente Gutiérrez no avanza a segunda ronda, supondría una histórica derrota de la derecha oficialista y tradicional y confirmaría las ansias de cambio de los colombianos.
BBC MUNDO