Un hombre padeció de un extraño síndrome que hacía que su cuerpo produjera alcohol. Literalmente, tenía en su organismo una fábrica de cerveza. Cuando comenzó a sentir pérdida de memoria, episodios de depresión, comportamiento agresivo y cambios mentales, en el año 2011, se percató de que algo estaba sucediendo.
El problema le duró seis años. Principalmente porque nadie creía que su cuerpo podría generar alcohol. Después de pasar por situaciones bastante incómodas, expertos de la Universidad de Richmond (Virginia ) asociaron sus síntomas a su previa exposición a antibióticos para tratar la microflora intestinal.
Se acota que por su exposición a los antibióticos, producto de una lesión en el dedo pulgar, desarrolló esa producción de alcohol en su organismo que era comparable a 10 cervezas.
El sujeto destaca que nadie le creía que no estaba ebrio.